¿Qué es el carácter dominante y recesivo?

El concepto de carácter dominante y recesivo es fundamental para comprender cómo se transmiten los rasgos hereditarios de una generación a otra. La genética nos enseña que cada organismo tiene un conjunto de genes que determinan su apariencia física. Estos genes están compuestos por alelos, variantes de un gen específico que se heredan de los progenitores.

Índice
  1. Carácter dominante
  2. Carácter recesivo
  3. Otros factores genéticos y excepciones

Carácter dominante

El carácter dominante se refiere al alelo que se expresa en el fenotipo de un organismo, es decir, es el que determina cómo se ve o se manifiesta una determinada característica. En la genética mendeliana, se utiliza una letra mayúscula para representar el alelo dominante. Por ejemplo, en el caso del color de ojos, el alelo para el color marrón es dominante y se representa como "B". Cuando un organismo tiene dos alelos dominantes (BB) o un alelo dominante y uno recesivo (Bb), el carácter dominante se expresa en el fenotipo.

Algunos ejemplos de carácter dominante son:

  • Color de ojos marrón
  • Piel oscura
  • Pelos rizados

Carácter recesivo

El carácter recesivo es el alelo que no se expresa en el fenotipo cuando está presente un alelo dominante. En la genética mendeliana, se utiliza una letra minúscula para representar el alelo recesivo. Siguiendo el ejemplo del color de ojos, el alelo para el color azul es recesivo y se representa como "b". Solo cuando ambos alelos son recesivos (bb), el carácter recesivo se expresa en el fenotipo del organismo.

Algunos ejemplos de carácter recesivo son:

  • Color de ojos azul
  • Piel clara
  • Pelos lisos

Otros factores genéticos y excepciones

Aunque la herencia mendeliana establece una relación clara entre el carácter dominante y el recesivo, es importante tener en cuenta que la genética es mucho más compleja y existen otros factores que pueden influir en la expresión de un carácter.

En algunos casos, puede haber codominancia, donde ambos alelos se expresan en el fenotipo de manera simultánea. Por ejemplo, en el grupo sanguíneo AB, los alelos A y B son codominantes, por lo que los individuos que tienen ambos alelos exhiben un fenotipo diferente a los individuos con solo uno de los alelos.

También existe la herencia poligénica, donde múltiples genes interactúan para determinar un carácter. Un ejemplo común es la altura, que es influenciada por varios genes en lugar de un único par de alelos dominantes y recesivos.

Comprender el concepto de carácter dominante y recesivo es clave para entender cómo se transmiten los rasgos hereditarios. Aunque la genética mendeliana establece una relación clara entre estos, es importante recordar que la herencia puede ser más compleja y estar influenciada por otros factores genéticos.

Si estás interesado en conocer más sobre genética y cómo se transmiten los rasgos hereditarios, te animamos a que sigas explorando este fascinante campo y descubras cómo se refleja en el mundo que nos rodea.

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